Elecciones AMIA: El sector ortodoxo confirmó a Ángel Barman como candidato a la presidencia

El Bloque Unido Religioso decidió impulsar a un dirigente propio como cabeza de la futura comisión directiva de la institución, una decisión que pone signos de interrogación a la posibilidad de un acuerdo con Abraham Kaul tras las elecciones del pasado 13 de abril.

Ángel Barman fue designado por el sector ortodoxo de la comunidad judía como el candidato a la presidencia de la AMIA, una decisión que pondría algunas trabas a la posibilidad de lograr un acuerdo con la agrupación representada por Abraham Kaul para conformar la próxima comisión directiva de la institución.
La imagen del abrazo y el baile final que protagonizaron el rabino Samuel Levin y el licenciado Kaul la noche del 13 de abril pasado, apenas conocido el resultado de las elecciones, parece romperse, al igual que la chance de una alianza entre los sectores.
Bernardo Zugman, actual pro-tesorero primero de la mutual, realizó el anuncio oficial de la candidatura de Barman durante la última sesión de la Comisión Directiva de AMIA.
La determinación de los dirigentes del "Bloque Unido Religioso", la agrupación que se impuso en los comicios de AMIA, tiene como objetivo que sea uno de sus hombres quien asuma la responsabilidad de ser el presidente de la AMIA, una posibilidad que será debatida durante la Asamblea Electoral que se realizará el 20 de mayo.
Según el Estatuto de la AMIA se requiere el voto de 54 representantes de asociados como mínimo en las tres primeras votaciones y simple mayoría, es decir 46 a partir de una cuarta votación, para designar al nuevo presidente.
El “Bloque Unido Religioso” sólo obtuvo 34 representantes de asociados, por lo que deberá acordar con alguna de las listas que compitieron en los comicios: el “Frente Unido Comunitario”, de Kaul, y “AMIA es de Todos”, la nómina integrada por el rabino Sergio Bergman, que consiguieron 30 y 21 miembros para la Asamblea, respectivamente.
Desde la fundación de la AMIA, en 1894, sería la primera vez que un dirigente identificado con la ortodoxia religiosa se posiciona en forma directa hacia la presidencia de la institución, una decisión que significaría el inicio de un cambio sustancial respecto a la manera en que se la condujo en las últimas décadas.
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Fuente: AJN